TRJ® Sistema de endoprótesis de cadera no cementada
Conservación del trocánter
El vástago de la prótesis de cadera TRJ® se implanta sin cemento. El diseño del vástago está basado en muchos años de experiencia en anclaje diafisario cónico en el fémur. La forma bicónica del vástago de cadera TRJ® sin recubrimiento y con superficie estriada se endereza en el extremo lateral proximal, de manera que el trocánter mayor se conserva lo máximo posible durante la implantación.
Sistema de raspa,
El concepto de raspa TRJ® de última generación posee una raspa modular desconectada del trocánter, que admite una preparación del hueso y conserva el músculo y el trocánter de forma segura con un diseño muy preciso del vástago diafisario. La punta distal excéntrica del vástago TRJ® simplifica la implantación mínimamente invasiva en el fémur y evita el riesgo de posicionamiento en varo del vástago.
Gama,
La gama de vástagos TRJ® está disponible en una variedad de tamaños que permite el ajuste universal a distintas morfologías de fémur así como la corrección de anatomías patológicas de la articulación y longitud de pierna. El vástago estándar TRJ® tiene un ángulo de cuello femoral CCD de 131°. El vástago TRJ® lateralizado tiene un ángulo de 123° y una compensación adicional de +6 mm. El diseño delgado del cuello TRJ® con cono 12/14 permite un rango de movimiento optimizado para la implantación de componentes de cabeza y cotilo Aesculap®.
Material
Los materiales utilizados para los implantes se especifican en los envases:
-Aleación de titanio forjado, Isotan® F (Ti6Al4V, según ISO 5832-3)
La tecnología empleada en el “pulido rugoso” de la superficie del vástago permite no dejar rastros medibles de otros materiales, facilitando así la osteointegración del vástago metafisario, y garantizando la estabilidad de la cadera en un primer estadio.
Indicación
Utilizar en caso de afección grave de la articulación coxofemoral para la que no existan alternativas terapéuticas:
• Artrosis degenerativa
• Artritis reumatoide
• Necrosis de la cabeza femoral
El médico puede elegir la solución más apropiada para el paciente en función de la gravedad de la patología. El médico será el responsable de establecer una indicación correcta.